
La moda y la joyería siempre han sido dos universos que se fusionan para ofrecer un espectáculo visual y simbólico. Y la princesa Leonor no es la excepción. A medida que ha crecido y ha madurado, también lo han hecho sus elecciones de joyas, evidenciando no solo su gusto personal sino también la importancia de los momentos que vive.
2018: Una Joya con Historia y Propósito
A sus 13 años, la princesa Leonor lució un colgante encargado a la prestigiosa joyería Quirós de Oviedo. Esta pieza no es solo una joya, es una representación de su papel como princesa. Elaborado en oro de dieciocho kilates, proveniente de ríos asturianos, y rodeado de oro blanco, lleva grabada una frase que trasciende el tiempo: «Con este emblema se defiende al piadoso. Con este emblema se vence al enemigo«. En el reverso, un recordatorio de su posición: «Leonor Princesa de Asturias«.

2019: Simplicidad Elegante
Al año siguiente, Leonor optó por una estética más sutil, evidenciada en unos delicados pendientes que, aunque pasaron inadvertidos para muchos debido a su melena ondulada, fueron una muestra de la elegancia innata que la caracteriza.
2022: Un Año de Cambios
Leonor nos dejó sin palabras con su elección de pendientes Chanel, una joya directamente del joyero de la reina Letizia. Sin embargo, ese no fue el único cambio; en el mismo evento, lució otros pendientes con los que fue obsequiada. En la noche, se dejó ver con una creación de oro y diamantes con forma de hoja, demostrando su habilidad para adaptar y renovar su estilo.
El Futuro Brilla para la Princesa
Aunque el estilismo que lucirá Leonor en la próxima ceremonia es un misterio, lo que sí sabemos es que le aguarda una joya de inigualable valor. Al cumplir la mayoría de edad y tras jurar la Constitución, se le entregará el collar de la Orden de Carlos III, un símbolo de la preparación y responsabilidad que asumirá como futura reina.